Las maromas las aprendí en el Congreso
cuando nos llevaron a una exhibición,
y vi rojos astracanes ser limpias vestales
o blancas señorías hacerse arpías vociferantes.
Me enseñaron a mostrar el culo al público
sin que la vergüenza me impidiera volar,
ni dejar de asirme a cualquier esqueje
donde pudiera tomar impulso y seguir de cabriolas…
© Alfredo Cedeño
Muy apropiado para estos tiempos... Saludos Amigo.
ResponderBorrarYlleny Rodríguez
Lo comparto
ResponderBorrarZafira
ResponderBorrarDenuncia hecha de una manera muy original. Me encantó por lo contundentemente que llega: "Me enseñaron a mostrar el culo al público
sin que la vergüenza me impidiera volar",
Abrazote y mi favorito.
Amaia Villa
Tu saltimbanqui, encierra una crítica con la que coincido totalmente; inspirado en esa imagen de saltimbanqui. Muy bueno. Fav.
ResponderBorrarMaría A López
¡Excelente!
ResponderBorrarJosé Ángel Romano
Es toda una declaración de autenticidad. Muy bueno. Un abrazo.
ResponderBorrarMartha Alicia Lombardelli
Al parecer esto es muy común en nuestros pueblos. Buena crítica Alfredo.
ResponderBorrarAraminta Solizabet Gálvez G.
Muy bueno como siempre, Alfredo. Saludos.
ResponderBorrarJesús Fonseca Rodríguez