Tantas naves como ondas amansan el río
mientras escogen veredas en el lomo de la espuma
con bamboleo de propelas que hieren el espejo,
el muchacho se sueña el mejor navegante:
va remontando por las orillas de las hazañas
que su abuelo le sembró cada noche en medio del agua.
© Alfredo Cedeño
¡Alfredo, qué nivel! Qué bien escrito y qué manejo del lenguaje.
ResponderBorrarUn abrazo
Martha Alicia Lombardelli
Me gusta, Alfredo. Mucho el verso final. La foto, como siempre, inmejorable.
ResponderBorrarJosé Rico-Villademoros Gamoneda
Bello, mucha esencia en pocas palabras. En pocas líneas he podido ver un montón de canoas...una forma de vida...la huella del hombre sobre el medio... "propóleas que hieren el espejo" y luego ese trabajo ha pasado de anónimo a concretarse en ese muchacho, y a mí que ese trabajo me parece cansado y aburrido me ha conmovido la frase "se sueña el mejor navegante" y ese "remontar las orillas de las hazañas de su abuelo" me ha enternecido por el sentimiento de orgullo, de pertenencia, su historia familiar. Me ha gustado. Ojala lo sienta así el muchacho de la foto! Porque así se llena de sentido ese trabajo.
ResponderBorrarUn abrazo
Amaia Villa
Envolvente y bellísimo, un maravilloso homenaje. Un abrazo!
ResponderBorrarSoraya Villal
Muy bueno¡
ResponderBorrarArturo Nava Muñoz
Lindo e intenso Alfredo. Por tus escritos asumo que tu abuelo ha sido un referente importante en tu vida. Saludos
ResponderBorrarAraminta Solizabet Gálvez García
que su abuelo le sembró cada noche en medio del agua... me ha gustado mucho Alfredo, pensar en la imagen del muchacho mientras el abuelo le contaba sus hazañas... enhorabuena
ResponderBorrarNuria de Espinosa