jueves, octubre 26, 2017

ES QUE NO APRENDEN


                Pese a los esfuerzos que en las últimas décadas ha realizado la andragogía por demostrar que loro viejo sí aprende a hablar, en nuestro país los perros hueveros siguen saqueando los nidos de las gallinas, quienes confían en que ellos nunca más seguirán haciendo de las suyas. Es más que reiterativo, diría que rayano en lo compulsivo, seguir derramando el agua ya vertida de la alcahuetería manifiesta de ese convite de pícaros que es la MUD.
                Recibí días antes del ahora nefasto 15 de octubre, pero muy ansiado y celebrado por los "luchadores infatigables de la democracia", un sesudo estudio en el que se hacían toda suerte de elucubraciones sobre los resultados. Recuerdo dos frases que ahora me saltan como muecas burlonas a la memoria: "Es muy probable que la Oposición gane más de 18 gobernaciones con cualquier escenario de abstención", decía la primera de ellas. La segunda rezaba: "Es difícil que el oficialismo gane más de 7 gobernaciones aún con los peores escenarios para la oposición y una recuperación de su votación."
                Por supuesto que el autor de dichas frases no atina a dar una explicación de cómo fue que la magia roja convirtió sus ditirámbicos guarismos en cinco peorras gobernaciones para los mudecos. Como bien es de suponer, nada se dice de las maniobras de patotero clase media del cara de niño Ocariz cuando soltó aquella muy infeliz frase de que los candidatos eran “los nuevos escuderos de La Resistencia”; ni de las de todos los demás del combo electorero.
                Ahora salen muchos, con cara de monja que descubre al sacristán leyendo un número viejo de Playboy, a denunciar la "sesgada actuación de las reptoras (sic) del CNE". ¡Infelices de tomo y  lomo!  ¿Acaso era de esperarse que actuaran de otra manera? ¿Por qué la honorable dirigencia opositora no tomó previsiones al respecto, y en cambio ordenó a los electos acatar, quienes saltaron raudos y felices, a juramentarse ante la prostituyente?
                Como bien era de esperarse, ahora el nuevo mantra es prepararse para las elecciones presidenciales del 2018. El bagaje de imbecilidades que se oyen para justificar lo injustificable ya ni arcadas provoca. El trapiche de Ramos Allup no cesa en su molienda, él se mantiene con sus aires de caporal vigilando el gallinero y soltando de vez en cuando alguna frase guachamarona para mantener a su público entretenido con su rol de galán matas villanas.
                Escribo mientras escucho a Ismael Rivera, y justo ahora él canta Comedia, de Plácido Acevedo, y su voz cimarrona suelta:
En el gran escenario de la farsa
la comedia de esta vida es inhumana…
hay payasos llevando armadura fría
y tenorios que no tienen ni una espada…

© Alfredo Cedeño

miércoles, octubre 18, 2017

¡A CALLARSE!


                 Jovencita, tú que fuiste manoseada a conciencia por un pelotón de guardias o policías o colectivos, o cualquiera de esas basuras con uniformes que por ahí pululan, y ahora andas criticando por los resultados de las elecciones y la falta de respuesta de la "dirección" opositora ante el robo de las elecciones del domingo. ¡Cállate!
                Estudiante pensador en pajaritos preñados que llevas saliendo a la calle a jugarte todo frente a una manada de esbirros con licencia para hacer lo que se le antoje y que ahora te estás dando golpes de pecho y bramando contra la muy ilustre "dirigencia" que no supo cuÁl respuesta dar ante el fraude comicial anunciado de mil maneras. ¡Cierra el pico!
                Mujer de muy buen ver que fuiste violada en un calabozo de la honorable policía política venezolana y que, pese a todo, saliste a votar por el candidato impuesto con un pañuelo en la nariz, y que ahora exiges contundencia ante la bandita de pícaros que se están robando los votos a cara descubierta. ¡Deja la majadería!
                Abuela que has tragado gas del bueno hasta caer desmayada por salir a la calle y que andas despotricando contra todos los que ahora están dando explicaciones muy santas e inteligentes de por qué fue que los rojos ganaron donde no había manera que lo hicieran. ¡Vete a rezar!
                Columnistas, analistas, observadores que habían estado de alarmistas anunciando que los honorables políticos rojos eran capaces de hacer la tracalería que les diera la gana y ahora pretenden exigir la pureza del Espíritu Santo en el Concilio de Letrán, son apenas una manada de malagradecidos insensatos que solo saben jugar la antipolítica. ¡Cállense de una buena vez!
                María Corina, insensata de siete suelas, que salió a decir que no iba a votar, es la gran responsable de este mal momento, porque si ella no hubiera estado de jetona, otro gallo estuviera cantando y hubiéramos ganado 35 gobernaciones. ¡Hay que callarla!
                Ignorantes todos que ahora cuestionan a Henri Falcón, Ismael García, Bernabé Gutiérrez y Carlos Ocariz hayan sido los candidatos, y no quieren ver que la realidad es  que no fueron apoyados por los ingratos electores de sus estados. ¡Enmudezcan de una vez por todas!
                Es necesario que ahora y siempre los venezolanos dejen de lado su arrogancia y sus ganas de ser los sabelotodos más arrequintados de la manigua y entiendan que los políticos son una gente seria a la que hay que hacerle loas y celebrarle todo cuanto hacen, solo ellos saben cuál es el camino que más le conviene al país. No es posible que ahora pretendan echarles a cuestas a nuestros sacrificados "dirigentes" la responsabilidad del desastre de este domingo y que se debió todo a que esa gran masa de ignorantes no les brindó masivo e incondicional apoyo.  ¡A callarse!
                Finalmente, dejen de estar levantando falsos testimonios y hablar de una bajada colectiva de pantalones ante un gobierno sin escrúpulos, porque es solo el diálogo y la negociación lo que nos hará libres.

© Alfredo Cedeño


miércoles, octubre 11, 2017

¿CUÁLES ACUERDOS?


                Respeto a cada cual en sus decisiones, y cumplo conmigo mismo, y el respeto que tengo por la libertad al alertar sobre los riesgos que se corren al tratar de establecer pactos con malandrines de quinto pelo. Las alarmas que se me disparan tienen que ver con el no corto recuento que se puede hacer de los incumplimientos de la fauna roja a todo cuanto han ofrecido o pactado en este tiempo que los hemos padecido.
                El primer acuerdo que ofrecieron al país vino de boca del propio comandante intergaláctico, quien aseguró con gesto amable y sonrisa pródiga que su proyecto no tenía nada que ver con el socialismo o el comunismo, que su oferta era de amor y compromiso con el país y las libertades económicas, y bla de bla que bla. 
                La segunda gran oferta que me viene a la memoria es la tragedia de Vargas. De nuevo el personaje antes citado, junto a su corte de chulos y mantenidos, juró por las once mil vírgenes, y las trescientas madamas de los lenocinios que debió frecuentar en su época de cadete, que esa sería una versión tropical de la tierra prometida. Aclaro que no incluyo entre una y otra los miles de pactos hechos, jurados, firmados y sellados por todos ellos.
                No puedo dejar de mencionar lo ofrecido luego de la bendita jornada del 11 de abril, su deposición y restitución a la silla presidencial. Nueva jornada de ofrecimientos, ¡cruz en mano y en cadena nacional!, de rectificaciones y de cuanta pejiguera pueda cualquiera imaginar. Manso cordero incapaz de siquiera pasarle la lengua a una mosca…
                Las lecciones del difunto fueron aprendidas a cabalidad por el bigote bailarín, y por lo profusa que es la cantidad de ejemplos necesitaría muchísimo más espacio del habitual para citar los más representativos.
                Todo ello es lo que me hace tan cuesta arriba pensar en que la jornada comicial, nuevamente sacada de las orejas por el combo rojo, será respetada a cabalidad. ¿Nadie recuerda acaso la victoria de Antonio Ledezma en Caracas? ¿En que terminó la Alcaldía Mayor?  ¿Es necesario mencionar más ejemplos?
                Por supuesto que corifeos, alcahuetas, plañideras y ciegos por elección saltarán a mostrar como gran trofeo las elecciones del 2007, o las del 2015. ¿Fueron respetados esos resultados? ¿Acaso no terminaron las huestes coloradas imponiendo por trochas y atajos lo que se consultó en las primeras? ¿No hicieron lo que les dio la gana con la flamante Asamblea Nacional? Seguramente lo ocurrido con Gilber Caro son elucubraciones mías y ello nunca ocurrió. Ni qué hablar de los alcaldes, concejales, y demás autoridades electas que han visto como la majestad de su cargo es mero papel sanitario.
                Allá cada cual con sus actos. El mío es y será tratar de no perder de vista lo que tenemos y llamar la atención sobre los riesgos que se corren, sobre todo cuando se cree en culebreros de feria que ofrecen ungüentos que curan el mal de amores, o hacen recobrar las dotes de un sátiro a los abuelos nonagenarios, o regenerar el himen de doncellas que bien han disfrutado lo que natura les otorgó.

© Alfredo Cedeño

miércoles, octubre 04, 2017

COMPAÑÍA DE DEMOLICIÓN

                
                Al César lo que es del César, asegura con sabiduría el viejo refrán. Y si algo hay que reconocerle al chavismo es su capacidad de destrucción, son algo así como esas viejas imágenes de una gran bola de acero que todo lo arrasa al ritmo de su bamboleo. No solo ha acabado con nuestra economía, sino también con nuestro sistema de salud, los rezagos de la clase media (que había logrado sobrevivir a los desmanes de una casta política que ahora exige ser tratada como la versión posmodernista de Moisés), la producción petrolera, la industria eléctrica, y todo cuanto pueda uno imaginarse.
                La obra de ruina que han ido dejando a su paso es comparable solo con las condiciones por demás lamentosas de Cuba en su generalidad. Pasear por las calles de La Habana es ruinoso para el ánimo de cualquiera, construcciones que al imaginarlas en buenas condiciones de mantenimiento te puedes suponer la preciosura de entorno que podría ser.  Ni hablar de su sistema de transporte público capitalino, es deprimente ver a hombres, mujeres y niños apelmazados en las rastras de transportar caña de azúcar donde son arracimados cual rebaños en camino a un potrero, cuando no a un matadero.
                Es una larguísima lista de ejemplos que podrían ser citados, no solo en La Habana, o en Moscú, también pueden mentarse las zonas liberadas del mando de la guerrilla colombiana vecina a la que ahora en nombre de la paz se le quiere otorgar cuanta prebenda cualquiera puede suponer.
                La obra de implantación de modelos decadentes ha sido de tal magnitud que lo ético ha sido socavado de manera perversa.  Hasta el modelo de lucha que significó para el mundo la forma cómo fue enfrentada y derrotada la dictadura de Pérez Jiménez ha sido exterminada. Ahora las dictaduras se enfrentan por vía electoral, y no cesan de invocar el ejemplo de Pinochet. Olvidan el pequeño detalle de que Chile tenía unas instituciones militares que no habían sido manoseadas, ultrajadas y prostituidas en su esencia como ha sido el caso de las fuerzas armadas venezolanas.
                Y debo decir que los abusos contra nuestros hombres de armas no son de reciente data, fueron abusadas por los rojos, lo fueron por la cuarta y son ahora vilipendiadas por los mudecos que le exigen una sumisión total y pago de unas penitencias de obediencia sumisa.
                No puedo evitar imaginar a Pompeyo Márquez llamando a votar contra Pérez Jiménez. Menos puedo dejar de evocar a dirigentes como Leonardo Ruiz Pineda, Antonio Pinto Salinas y Alberto Carnevalli. Sin dejar de lado a los oficiales León Droz Blanco, Wilfrido Omaña y Jesús Alberto Blanco entre muchos otros. Panteón de héroes pervertido por una historia que el chavismo ha borrado para lograr implantar nuevos paradigmas de lucha.  Cosas veredes…

© Alfredo Cedeño

Follow bandolero69 on Twitter