Altos de la Cruz es un caserío de las
montañas andinas, está ubicado entre Valera y Mendoza, estado Trujillo, 430 kilómetros al
oeste de Caracas, capital de Venezuela.
Algunos domingos los agricultores
y campesinos de esa comunidad se reúnen a compartir. Un domingo quisieron jugar fútbol. Cuando
comenzaron a reunirse la pelota que tenían era un balón de basket ball, sin
embargo, eso no fue obstáculo para realizar el encuentro.
Adultos, adolescentes y niños,
bien como jugadores o como espectadores compartieron alegrías e inocencias que
rodaban por entre las montañas y la niebla, mientras la pelota rebotaba al
compás de sus amagos por llegar a la red invisible de una portería hecha con
palos desnudos, donde las risas eran siempre el score final.
No me canso de repetir: ¿Cómo
hace uno para no emocionarse al saberse dueño del privilegio que es ser parte
de una tierra tan mágica y maravillosa como esta? ¡Qué suerte tener esta
bendición!
© Alfredo Cedeño