La muchacha monta su pierna sobre el muchacho
en un banco que derrite pudores sin palabras
y de un tajo arranca en las pupilas vecinas
las penas que cercan sus ingles y las de él.
Se hacen cirios que naufragan sin medallas
en una Caracas que cada día nos duele más
sin crímenes perfectos que callen las calles
y podamos seguirnos viendo vivos en ellos.
Que lancen sus coches y almas frías desveladas
para irlos sacudiendo con la carne firme
de los miedos que no se acuartelan
y saben ganarse en desafíos los gestos libres.
Por eso, esta Caracas desafiante se besa
en las piernas doradas de la manceba
que cabalga al abordaje a su muchacho
en los asientos públicos del corazón citadino.
© Alfredo Cedeño
1 comentario:
Caracas?...Venezuela?
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