El espectro luminoso quiso abandonar la cruz
pero le dio lástima verla íngrima y sola
plantada sobre el techo de la capilla
sin poder anunciar la parusía o el adiós.
Se hizo arco para ampararla y cruzar
al ritmo de una brillante hoz multicolor
…y los cerros se ahogaron en un charco
donde las dudas retoñan con pertinacia.
© Alfredo Cedeño
3 comentarios:
Me encanta como haces poesía de las cosas más sencillas. Besos.
Ylleny Rodríguez
Que hermoso...
Zafira
Hermoso.
Un abrazo
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