Mis estrellas son navegantes que arman su derrotero
entre compases y brújulas ignorantes de desgracias,
son de sonrisa abierta como fiesta de santo alborotador
que baila sobre los hombros desguarnecidos de sus devotos,
son sepultureras de las tristezas que la vanidad coloca
entre los aguijones de una mujer fatal marchita…
© Alfredo Cedeño
1 comentario:
La inocencia, es la base de la esperanza.
Hermoso! feliz día.
Dora.
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