Ella salió como las culpas de mi casa
sigilosa y cuando menos lo esperaba
dejándome tres orgasmos bajo la almohada
y el corazón roto… lleno de cardenales.
Siempre me dijo que era una historia corta
como los cuentos brevísimos de Monterroso
pero nunca que era un acto de magia
y desapareció entre las mangas de la noche.
Nunca pude saber cuántos besos castos
le cabían en el pubis que me olía a duda
como un submarino en el puerto de Marsella
o una cascada de putas en un barrio chino.
© Alfredo Cedeño
4 comentarios:
Sabes porqué?...
Porque asi, el recuerdo siempre será un buen recuerdo¡¡¡
Besos.
Alfredo,
Creo que la dejástes ir y ahora estás........"con tres orgasmos bajo la almohada y el corazón roto… lleno de cardenales.
¿Qué vas hacer para remendar tu corazón roto?
Te quedastes con una historia corta, con el acto de magia y sin contar los besos.
Hermoso y muy imaginativo
Como siempre
Gata
Muchachito: no seas embustero.
No tienes corazón. Tan solo corazón de padre, porque el del amor carnal, o naciste sin él o te lo robó alguna, que, si supo llegar, pero igual se fue...
TU CONCIENCIA...
¿Quién hacía el arte de birlibirloque? ¿Aún sobrevive a ese momento de magia cuando los olores se vuelven una transitoriedad o una vacilación de efluvios sin un yuan que cobrar? Quedan las incógnitas...Ch.
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